Alimentos para perros adultos, calidad y no cantidad

A medida que un perro avanza en su crecimiento es necesario tener en cuenta que sus necesidades alimenticias cambiarán y es importante conocer esos cambios para asegurarnos de estar proporcionándole lo que realmente requiere para su mantención y desarrollo.

Si durante la primera etapa se privilegiaba alimentos ricos en calorías para  suplir todo el gasto de energía  que un perro cachorro realiza, cuando el perro se convierte en adulto es necesario hacer un cambio a una alimentación más equilibrada.  

Preparándonos para el cambio

Dependiendo de la raza, este cambio deberá realizarse entre los 6 y los 18 meses de edad. Hay que tener en cuenta que los perros grandes demoran un poco más en el proceso de convertirse en adulto. Los pequeños por lo  general lo hacen antes del primer año. 

El cambio en la dieta está pensado en mantener alejados los problemas de salud típicos que acarrea un desequilibrio alimenticio. Al igual que en los humanos, una sobrealimentación podría detonar problemas graves que se pueden evitar a tiempo.

Es importante tener en cuenta que el cambio de alimentación se debe hacer en forma gradual, para que el perro acostumbre su estómago a la nueva dieta ya que de otro modo podría enfermarse. Lo recomendado es ir disminuyendo la comida de cachorro y aumentando la de adulto en proporciones durante al menos una semana. 

Por qué realizar el cambio

Los perros adultos tienden a moderar su actividad física y una vez que han completado su proceso de desarrollo inicial, cambian sus necesidades nutritivas, puesto que sus huesos y órganos ya no requieren ciertos nutrientes que son esenciales cuando están en etapa de crecimiento, o al menos no en las cantidades que requiere un cachorro.

Mantener un peso óptimo se consigue poniendo atención no solo a cantidad, sino que también a la calidad del alimento. De otro modo, nuestro fiel amigo tendrá que lidiar con enfermedades como la obesidad o la diabetes, y sufrirá además de serios problemas al corazón, intestinos y otros órganos. 

En el caso de los perros adultos, la ingesta de alimento para cachorros puede ocasionar también problemas hepáticos y renales, puesto que su organismo no alcanza a metabolizar todos los nutrientes que estos contienen.

Es necesario también comprender que cada mascota tiene su propio proceso y que no es recomendable atrasar o demorar demasiado el cambio. 

Un alimento adecuado para cada necesidad

Los alimentos para perros están desarrollados en base a distintas fórmulas, dependiendo de la edad, el tamaño o de características especiales que tienen que ver con su raza o el estilo de vida que puedan llevar.

La mayoría de estas fórmulas combinan proteínas de origen animal y también vegetal, grasas esenciales,  hidratos de carbono, vitaminas y minerales.

La base esencial de la dieta

Las proteínas ayudan a la construcción de los tejidos musculares, las grasas por su parte mantienen la piel y el pelo saludables, los carbohidratos son la fuente primaria de energía, mientras que las vitaminas y minerales fortalecen los huesos y la visión, entre otros.

Otro nutriente esencial son las fibras, esenciales para garantizar un buen funcionamiento del intestino.

Un perro adulto de igual modo necesita de todos estos nutrientes para mantener en correcto funcionamiento su organismo, lo que varía es la proporción que ellos requieren. A medida que avanzan en edad se van reduciendo las porciones diarias.

La importancia del ejercicio y la relación con la dieta

El ejercicio regular es necesario para evitar el sobrepeso y sus enfermedades asociadas. Además, permite mantener huesos fuertes y una buena musculatura.  

La frecuencia con que el perro realiza actividad física también influye en la cantidad de alimento que debería consumir. Un perro acostumbrado a ejercitarse en forma diaria no tiene las mismas necesidades que uno que posee poca actividad.

Distintos formatos para cada necesidad

Los alimentos para perros pueden venir en formatos húmedos o secos y cada uno tiene ventajas y desventajas, por eso es importante conocer bien a tu mascota. 

El alimento húmedo para perros tiene una textura más suave y un olor más agradable, son ideales si el perro tiene alguna afección bucal o si es un perro mayor que ya comienza a tener problemas con su dentadura.

En cambio el alimento seco para perros se caracteriza por una menor humedad y mayor densidad, lo que resulta muy úitl para controlar el sarro de las piezas dentales y mantenerlas en buen estado. 

Combinar ambos tipos puede ser una buena opción, pero siempre hay que estar atentos a sus gustos, preferencias y necesidades. No hay que olvidar también la hidratación, otro  punto importante del cuidado. 

Una dieta sabrosa y con ingredientes sanos

Sense es una marca que ofrece una completa solución de alimento sano para perros, con productos holísticos e hipoalergénicos, libres de grano y gluten,  proporcionando un equilibrio adecuado entre sabor y salud. 

Los alimentos de Sense están pensados en cubrir necesidades específicas como ayudar a desarrollar y mantener la masa muscular, o aliviar a aquellas mascotas con digestión sensible y que necesitan alimentación especial. 

¿A qué poner atención?

Un perro mal alimentado experimenta cambios importantes en su estado de ánimo debido a la falta de energía. También es posible observar señales externas como problemas en el pelaje o afecciones a la piel debido a alergias. Todo esto requiere de atención y un cambio seguro en la en la forma en que lo estás alimentando. 

Ante cualquier duda, siempre es bueno consultar a un especialista que nos guíe para realizar el cambio de forma adecuada y así no poner en riesgo a nuestro más fiel compañero.